MAR DEL PLATA, Argentina - Cuando Argentina estaba asomada al balcón de la gloria gracias al triunfo de David Nalbandian, España reaccionó de la mano de Feliciano López empatar el viernes 1-1 la serie la final de la Copa Davis.

Nalbandian demolió 6-3, 6-2, 6-3 a David Ferrer para darle el primer punto a Argentina, cuyo atardecer se despidió con resignada tristeza después que López dio la gran sorpresa al derrotar 4-6, 7-6 (2), 7-6 (4), 6-3 a Juan Martín del Potro en 3 horas y 19 minutos. Para colmo de males para las aspiraciones de Argentina, el número uno de Argentina y noveno del mundo terminó con visibles muestras de estar lesionado, lo cual abría un interrogante para su presentación en los singles del domingo, cuando se definirá el campeonato. El sábado se jugará el doble entre Agustín Calleri-José Acasuso, o bien alguno de ellos junto con un agrandado Nalbandian, ante la dupla López-Fernando Verdasco. Mientras que para Nalbandian el partido fue un paseo en casi dos horas, el duelo entre López y Del Potro fue mucho más luchado, aunque el español dio muestras de jugar mejor con un buen saque y volea ante unas 10.000 personas en el estadio Islas Malvinas. "Jugué un gran partido, y bueno, ganarlo rápido de la forma que jugué creo que mejor imposible", comentó Nalbandian en medio de la cancha donde destrozó a su oponente, el número uno de España y 12 del ranking mundial. Ferrer, por su parte, no buscó atenuantes a la derrota y dijo que "realmente me sentí inferior" a Nalbandian. "David fue muy superior y no hay más que decir", agregó Ferrer. "No me tenía fe y me he sentido mal tenísticamente". Nalbandian se mostró un poco sorprendido por el bajo nivel de Ferrer, quien le había ganado en seis de sus nueve choques anteriores. "Contra Ferrer uno siempre tiene un partido duro y largo, ya que corre mucho, pero lo cerré antes de lo que pensaba", dijo el "Rey David", quien en su camino a la victoria tuvo 54 winners y solo 27 errores no forzados. Nalbandian (11) sacó rápida ventaja al quebrar en el tercer game con fuerza y precisión, ante un Ferrer que tenía problemas en las devoluciones. El estadio, que por entonces era un remanso de paz, amplificó entonces un aliento que se hizo aliado incondicional de Nalbandian. Argentina busca disfrutar de su primera Ensaladera de Plata, tras haber perdido las finales de 1981 ante Estados Unidos y la de 2006 contra Rusia, en ambos casos como visitante. España disfrutó dos veces de ese trofeo, en el 2000 y 2004. Nalbandian confirmó el quiebre en el cuarto y sin darle tregua ni cuartel levantó un 40-0 para cosechar el quiebre y ponerse 3-1. Luego aumentó su propia ventaja para aprovechar una devolución en la red e irse al descanso con un inapelable 6-2. En mucha menor cantidad pero tan bulliciosos como los locales, desde las gargantas españolas partió a coro: "Este partido lo tenemos que ganar", una de las frases de aliento que suele recibir la "Furia roja" en cualquier deporte. Uno de los momentos clave del partido fue en el segundo set, cuando el argentino caía 40-0 y volvió a quebrar para ponerse 4-2. A partir de allí ganó su propio servicio para aumentar la ventaja y recibir para set, el cual lo cerró 6-2 "Acabamos de dar el primer pasito del fin de semana, esperamos que todos podamos seguir jugando bien", destacó Nalbandian, quien sacó debido provecho de la pista súper veloz que eligió junto con sus compañeros. Ferrer le restó importancia a la superficie. "No influyó para nada, es una pista de tenis como cualquier otra", dijo el español. Nalbandian, en cambio, reconoció que la carpeta fue un gran aliado para su juego. "Esa fue la idea, hacer una cancha rápida, por eso la localía tiene tanta importancia", destacó el argentino. "En el primer punto se notó que la cancha me favoreció". El hecho de que haya jugado nada más que dos horas le permitió vislumbrar a Nalbandian que podría jugar el sábado en el choque de dobles. En el partido de fondo, Del Potro y López quedaron 2-2 y sin resignar el servicio al cabo de los primeros cuatro games, pero después el argentino empezó a sacar ventaja, quebró a su rival y con un par de aces para encaminarse hacia la conquista del primer set. En el segundo, Del Potro y López hicieron gala de la potencia de sus saques y no hubo quiebres. En el tiebreak, López empezó a dominar con su volea para embolsar los primeros cuatro puntos. Luego se afirmó en su juego de fondo y con devoluciones profundas cerró el duelo a su favor para mantener vivas las ilusiones de la "Armada" española, diezmada por la ausencia de Rafael Nadal por lesión. Un calco del primero. Así fue el tercer set que también se definió en el tiebreak, con Del Potro saliendo 2-0 arriba y luego 4-2 aprovechando una doble falta de su rival, en medio de los ecos generosos del estadio que amplificaba el aliento de los argentinos. Pero López acalló el bullicio cuando se puso 6-4 y cerró el set con tremendo ace. Tras ese golpe sicológico, López se mantuvo firme en su juego y llegó a ponerse 3-1 hasta que llegó reacción de "Delpo" quien descontó al quebrarle el saque aprovechando una fallida devolución en la red. Pero en la siguiente acción el silencio dominó al estadio cuando Del Potro fue a buscar una pelota larga en un esfuerzo supremo y sufrió un tirón en la ingle de su pierna derecha que minó sus posibilidades y le allanó la victoria al español. por AP, Fox Sports International